Hay un placer en los bosques sin senderos,
Hay un éxtasis en la costa solitaria,
Hay compañía, allí donde nadie se hace presente,
Al lado del mar profundo, y música en su rugido:
No amo menos al hombre, sino más a la Naturaleza,
A partir de nuestros encuentros, a los que asisto sigiloso,
A partir de todo lo que puedo ser, o que he visto antes,
Para fundirme con el Universo y sentir
Lo que nunca puedo expresar aunque me sea imposible ocultar.
Lord Byron